
Camino por un trecho mal cocido,
me aventuro hacia adentro,sin estar seguro,
no preciso saber si carga o no con sentido,es todo lo que tengo,
quizás sea lo que me mantiene vivo.
Y de que sirve escribir solo cuando siento perdida la inspiración,
las musas se rematan minuto a minuto en el mercado de apuestas,
desde un vidrio sucio, veo sonrisas, diabólicas,
inconclusas muecas.
Apretado y agarrado al pasamanos,por la ventana se me cae un sueño.
Me dice un pasajero que no desespere,algunos vienen fallados,
yo sigo,
evito,
nuevamente salgo herido, incomprendido.
Bajo para mañana intentar volver a elevarme,
abro una puerta,
abro una puerta,
doy con tus fotos, un cuarto vacío,un perro melancólico y flaco, apto para amar.
Derramo tinta por todas las paredes, llorando tu huida,sin escalas ni regreso.
Al final, sentado en mi sofá,
me asesino a cuenta gotas,
postrado como la estatua de tu ángel guardián.


no dejes que se te caiga el sueño...
ResponderEliminarcuidalo, si es tuyo y de nadie mas, dale vida a esos sueños.
y ayudame a que yo tambien te los haga posible.